Cuando un artista que me gusta mucho (de los tres vivos que me gustan mucho) saca nuevo trabajo suelo reaccionar así: al principio si no me acaba me digo a mí mismo "bueno, no está mal, aunque no se ha lucido mucho...". Y al rato ya no me importa: recuerdo esas otras muchas canciones que tanto hicieron por mí, sonrío y sigo tarareando las nuevas hasta familiarizarme con ellas... y cogerlas cariño.
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